jueves, 2 de enero de 2020

Porsche 909 Bergspyder. Rolf Stommelen. Mont Ventoux 1968

Los 21km y medio de subida al Mont Ventoux  destacan por su dureza.
Es tristemente célebre por el fallecimiento de un famoso ciclista durante un Tour de France y por haberse quedado con la vida de mas de un piloto desde su primera edición en 1904 en la que el Packard&Levassor de Paul Chauchor culminó el gigante de la Provenza en poco más de 27' hasta los escasos 9 minutos escasos  en los que Jimmy Mieusset llevó su March 722 al observatorio militar en la última edición con el recorrido original en 1973.
En su palmarés figuran muchos de los grandes de la historia, desde Caracciola o Hermman a Trigtignant o Berha  a los grande de la montaña como Schetty o el mismo  Mieusset.
En ese palmarés figura el genial Rolf Stommelen, que llegó a la cima con un Porsche 910 en 1967 en menos tiempo que nadie.


Pero voy a hablar de un aparato realmente sorprendente que llevó a la segunda posición en la edición de 1968 tras el Porsche 910 de su compañero Gerhard Mitter.


El Porsche 909 Bergspyder fue desarrollado optimizando la relacción peso potencia hasta límites desconocidos. Utilizando los materiales mas ligeros conocidos y un chasis de aluminio en nido de abeja alrededor de un motor boxer de 8 cilindros y 2 litros procedente del F1 de la marca y que alcanzaba casi 300CV a cerca de 9500rpm y que aún asi era casi lo mas corriente del coche...
Titanio, plata, fibra de vidrio, plástico, madera de balsa o discos de freno de berilio. Sistemas electricos reducidos a lo mínimo imprescindible. Por no tener no tenía ni bomba de combustible, utilizaba un sistema presurizado por nitrógeno en un pequeño tanque de goma de menos de 20l que ahorraba más de 20kgrs en el sistema.


El pequeño 909 medía menos de 3m y medio de largo por unos escasos 75cm de alto, que harían que un GT40 pareciera una furgoneta... ¿su peso? 375kg en orden de marcha menos que muchos motores por si solos...



Aceleraba de 0 a 100 en menos de 3 segundos...
Pero era tan radical que los pilotos preferían los Porsche mas convencionales. Solo se fabricaron dos unidades y sirvió de base de trabajo para los exitosos Sport de Porsche de los años siguientes...



 El Porsche 909 es un coche cuyo tamaño en inversamente proporcional a su importancia historica y que Ñapaslot i+s se ha tomado la molestia de reproducir para la alegría de un puñado de afortunados entre los que tengo el privilegio de encontrarme.


El kit consta de un montón de piezas de resina que ajustan ,uy bien entre ellas, se nota el cariño en la reproducción


Es una buenas costumbre repasar bien de lija antes de pintar y este caso no lo es menos, ya que su origen 3D se evidencia en algunos restos de lineas de nivel que es mejor igualar


Como quiero hace la versión de Stommelen de Mont Ventoux debo pintar de verde las derivas traseras


Como tengo mi propio criterio preferí sustituir la cabeza que traía por una que me gusta más, al tiempo que daba color adecuado a las diferentes piezas


Se aprecia el detalle de las piezas que destacan en un conjunto tan pequeño y lleno de detalles



Las calcas troqueladas no ofrecen la menor resistencia a la colocación, solo hay que posarla en el lugar adecuado


Cada paso voy comprobando que todo ajuste bien y detallamos los colores de cada pieza, así como el casco de Stommelen



Solo falta dejar secar el barniz antes del montaje final


Durante el detallado final de las multiples piezas descubrimos de nuevo lo bien que ajusta todo a poco que te apliques en ello



Para la mecánica tiré de existencias, preferí una corona de 24 por lo exiguo del espacio y creo que fue un acierto, ya que todo parece encajar bien

El pequeño Porsche 909 luce muchísimo pese a su pequeño tamaño, los chicos de Ñapaslot puden estar orgullosos de su trabajo, ha sido gusto montarlo