Un Ferrari 512S para correr

A finales de los 60, el CSI modificó el reglamento de los prototipos (Gr.6), fijándolo en 3 litros de cilindrada, dejando así fuera de juego a los Ford MK2 dominadores y demasiado rápidos según ellos. Pretendía que aparecieran nuevos contendientes, sin embargo, la pretendida adaptación de los motores de la F1 a los prototipos dieron más problemas de los que les parecía en los despachos.
Pero había otra alternativa. Para homologar un prototipo como Sport Gr.5 había que fabricar 25 unidades con un motor de hasta 5 litros, ventana dejada para dar continuidad a los GT40 y los Lola T70. Ese fué el camino elegido por Porsche con el 917 y por Ferrari con los 512.
Porsche fabricó las 25 unidades, vendiéndolas a otras estructuras de competición, pero mantenidas por fábrica todas las unidades, eso les sirvió para dominar los campeonatos de 1970 y 1971, pero hace que hoy en día sean coche muy apreciados pero muy difíciles de mantener, al ser de complicado mantenimiento, ya que hay muy pocos especialistas en su mecánica, de ahí que en las competiciones actuales de clásicos sean superados por los 512, mucho más fáciles de mantener.
Ferrari siguió con su 512 ese mismo camino, fabricando también las 25 unidades y vendiéndolas a sus clientes, pero, en este caso, en el mantenimiento cada uno se tenía que buscar la vida y, de paso, competir contra el equipo oficial, técnicamente superior. Ese y el poco rodaje del coche en carrera (Porsche había hecho competir ya el 917 durante 1969) hicieron que, pese a ser coches bastante similares en prestaciones, los 512S dieran bastantes problemas de fiabilidad, generalmente de transmisión y suspensión. La ventaja venía sobretodo por la diferencia de peso del sistema de refrigeración (aire en los 917 y agua en los 512) y algunas piezas estructurales más livianas en los 917. Evidentemente los 512 privados solían tener prestaciones inferiores a las de los 917 similares, como comentaba, mantenidos directamente por fábrica.
A finales de 1970 empezaron a aparecer evoluciones de carrocería en los 512, asemejándose a la eficaz linea de los 917, conocidos como 512M, evidentemente de estos no se fabricaron los 25, sino solo un puñado con evoluciones para el equipo oficial el resto eran simples cambios de carrocería sobre la base del S.

Para el mío elegí en princpio esta decoración de Daytona70











Aunque también me tentaba esta pikup del 71, jejeje




Y también la de la Escudería Montjuich, pero me gusta tanto la carrocería que no me apetecía modificarla

Llevabamos en el club bastante tiempo dándole vueltas a hacer una carrera diferente tipo Tour de France Auto de slot a 1/24, mezclando circuito, tramos de rallye y subidas, y en la que poder con coches que no se ven habitualmente. Por fin este sábado haremos la primera a ver que pasa, pero antes había que hacerse un Sport para la categoría "gorda"...

Hace muuuuuuuchos años me compré una maqueta de Heller por 900 pelas, que me encantaba, lo malo es que las piezas malamente encajaban y eran miles de ellas, pero la monté, como las piezas de la carrocería eran todas coloradas, decidí (para mi alegría actual) no pintarla, aunque más tarde la barnicé con una cosa (no debo llamarlo barniz) a brocha, como no. Tras una mudanza hace años, en la que fallecieron la mayoría de mis maquetas de 1/24, que voy recuperando para la causa slotera poco a poco, estaba en este estado



Me puse a desmontarlo y me llevé la sorpresa del recuerdo de los miles de piezas de la maqueta, solo la carrocería deben ser trescientas



La cosa aquella que me vendieran como barniz, afortunadamente sale casi sin frotar en cuanto le enseño el etanol, cosa que no puedo decir de la pintura plata de la parte inferior. El trabajo merece la pena, solo por que se aprecien los miles de remaches que hay por toda la carrocería.

Una vez desbarnizada selecciono las piezas de la carrocería...


Voy a flipar para juntarlas y que quede medianamente consistente, pero lo intenté...

Al final el conjunto quedó bastante decente y medianamente consistente a base de reforzar las juntas con tela, que no quiero que se desmonte al primer contacto con la decoración, las vallas... o el suelo...



Cuando ya estaba casi en la cabina de pintura, resultó que mi amigo Juan compró una maqueta de Fujimi que era el mismo coche que el mío de Revell... el mismo, el mismo, que hasta conserva aún los logos de Revell, y traía calcas para hacer una versión con el número 23, así que investigué un poco y descubrí que correspondía con esta preciosidad de la Ecurie Francorchamps de los 100km de Spa del 70 con Derek Bell y Houges de Fierlant al volante -chasis #1030#-


Este es el mismo coche en las 24hde Daytona del 71


Así que me enamoré... así que tras árduas negociaciones conseguí que me pasara las calcas, -y ya que estaba, que me lo pintara también, jajajaja- y abandoné la idea original del 28# Daytona 70 de Icks/Merzario/Andretti... Como me gusta este amarillo...

Tras no pocas peripecias conseguí montar los cristales, y algún que otro accesorio, antes de devolverselo a Juan para que terminara con la puesta a punto y la adaptación del chasis



Tras no pocas peripecias conseguí montar los cristales, y algún que otro accesorio, antes de devolverselo a Juan para que terminara con la puesta a punto y la adaptación del chasis, que es una garantía de prestaciones, aunque yo la cague luego con mi "espectacular pilotaje"

Por cuestión de tiempo y de que la hoja de calcas de Fujimi estaba incompleta en cuanto a patrocinadores, le faltan los logos de las puertas de la Ecurie Francorchamps y de Ferodo, pero como siendo realista, lo más probable es que tras la carrera del sábado tenga que entrar en el taller a restaurarse de las consecuencias de la carrera y de mi dedo, no tiene mayor importancia

Como tenía un trocito de caja de cambios y un agujerito en la parte trasera del coche, así que la he puesto pegada al chasis, así es peso no suspendido... No es que me vaya a influir en la conducción sino que me gustaba así, independiente de la carrocería.

Y con eso unos cablecitos y un señor dentro yastá





Ahora a romperlo el sábado , ya os contaré